Como parte del Programa de Manejo Integral del Arbolado Urbano, el Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez encabezado por el edil Francisco Martínez Neri, a través de la Secretaría de Medio Ambiente y Cambio Climático realizó la cuarta fertilización del año en el Zócalo y la Alameda de León.

Estas acciones tienen como objetivo fortalecer los árboles históricos de esta emblemática zona mejorando su salud, desarrollo y capacidad de adaptación ante los efectos del cambio climático.

La titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Cambio Climático, Elsa Ortiz Rodríguez, destacó que este programa es un compromiso con el medio ambiente y con la conservación de los espacios públicos de la ciudad.

“Estamos por concluir la fertilización, un trabajo que nos enorgullece, ya que el cuidado del medio ambiente es primordial. El objetivo es fortalecer a los árboles, que estén sanos y bonitos para que todas y todos podamos disfrutar del corazón de la ciudad”, afirmó.

Este programa ha incluido análisis de suelos, fertilizaciones, manejo fitosanitario y podas preventivas. A lo largo del año, se llevaron a cabo cuatro fertilizaciones que incluyeron la aplicación de nutrientes como nitrógeno, fósforo y potasio, esenciales para la salud de los árboles.

Asimismo, se realizaron podas preventivas para retirar exceso de tonelaje en todos los árboles de la zona, inyecciones de insecticidas sistémicos para combatir plagas y hongos, y la aplicación de enraizadores en ejemplares de mayor antigüedad, algunos con edades de hasta 150 años.

Ortíz Rodríguez también informó que, durante estos días, se están utilizando pipas con 10 mil litros de agua para hidratar los árboles y facilitar la absorción de los nutrientes, además de que se inyectaron insecticidas sistémicos a 18 árboles y se realizaron 18 tomografías para evaluar su estado interno.

El mantenimiento de los jardines históricos del Zócalo y la Alameda de León es esencial no solo por su valor cultural y ambiental, sino también por los servicios ecosistémicos que estos espacios proporcionan, como la regulación de microclimas, la reducción de contaminantes y la mejora de la calidad del aire. Estas acciones reflejan el compromiso de la administración municipal con la conservación del patrimonio natural de la ciudad.