Comunicadoras y comunicadores oaxaqueños visitaron aquí la Estación de Transferencia y Planta de Selección Azcapotzalco (ETPSA) que procesa mil toneladas de residuos al día y es el modelo para el Centro Integral de Revalorización de Residuos Sólidos Urbanos (CIRRSU), que se instalará en San Lorenzo Albarradas para solucionar la crisis de la basura en la zona metropolitana de Oaxaca.
Las y los representantes de los medios de comunicación oaxaqueños conocieron el funcionamiento de la Estación más grande y moderna de Latinoamérica y que recibe mil 400 toneladas de residuos diariamente.
Por ello, este modelo integral se contempla como la mejor opción para solucionar la crisis de la basura en la entidad, provocada por la omisión y la indolencia de gobiernos anteriores ante una problemática que provoca graves daños a la ciudadanía.
El éxito de este proyecto es la participación de la ciudadanía para la separación de los desechos, ya que el modelo permite aprovechar al máximo los residuos orgánicos para elaboración de composta y generación de combustible para cementeras.
En la ETPSA se procesan residuos como papel, cartón, envases multicapa, PET y polietileno de alta densidad (PEAD), bolsas y películas plásticas, latas de aluminio, bolsas metalizadas, textiles, vidrio y otros metales, generando así una economía circular en la Ciudad de México.
La visita tiene el objetivo de informar a la ciudadanía los beneficios de la instalación del CIRRSU en San Lorenzo Albarradas, el cual permitirá aprovechar al máximo los materiales reciclables, creará fuentes de empleo y generará ingresos económicos muy importantes por el aprovechamiento de los residuos sólidos.
El subdirector de Plantas de Selección en la Ciudad de México, Ricardo Estrada explicó que este modelo funciona en Brasil y diferentes países de Europa y consideró que es una de las mejores opciones para solucionar el problema de la basura en Oaxaca, como parte de un sistema integral para el tratamiento de los residuos sólidos urbanos.
La Estación tuvo una inversión inicial de 385 millones de pesos y tiene un costo de operación de 3 millones mensuales. El tratamiento que se da a los residuos permite que se puedan vender materiales reciclados que generan el pago de 20 por ciento del costo de operación.
Además de la creación de empleos, se genera composta que funciona como abono para cultivos, combustible para las cementeras y se reduce al máximo la contaminación al ambiente
