La sotana perdió la batalla ante el amor esta mañana en Oaxaca, después de que el sacerdote Armando Barrón Peralta le dio el sí en el altar a Venildia Abigail López González, migrante hondureña con la que tiene una relación de 10 meses. Con esto, el párroco no solo se convierte en recién casado, sino que además dejará los hábitos y se dedicará a vivir con su pareja.
El padre José Alejandro Solalinde Guerra no solamente vio con buenos ojos el retiro de su colega en nombre del romance, sino que además firmó el acta de matrimonio como testigo de esta unión que fue sellada gracias a la oficial del registro Elizabeth Gurrion Matías, quien determinó que se cumplieron todos los requisitos legales.
Abigail salió de Honduras para llegar a EU, pero se quedó en México por amor
Abigail tiene 47 años de edad y como muchos de los migrantes que dejan su natal Honduras, llegó a suelo mexicano con la intención de llegar hasta Estados Unidos en busca del “sueño americano”.
El camino la llevó hasta al albergue de migrantes “Hermanos en el Camino”, que dirige Solalinde y el cual se encuentra en Ciudad Ixtepec. Además de encontrarse con un lugar donde pernoctar de manera segura, la mujer halló la amistad de Armando.
El hombre de 67 años de edad se convirtió en su amigo. Las charlas entre ellos, los encuentros fortuitos y la convivencia amena duró dos meses hasta que todo dio un salto.
Fuente: El Heraldo/ Martha Izquierdo